CRÓNICA VERNÁCULA
El pasado mes de
marzo tuve el placer de asistir a las XV Jornadas Técnicas de Arquitectura
Vernácula celebradas en la capital cubana de La Habana, importante evento
organizado por la Cátedra Gonzalo de Cárdenas de Arquitectura Vernácula y por
la Oficina del Historiador de La Habana.
Hacía ya unos meses
que Javier de Cárdenas Chávarri, presidente del Patronato de la Fundación Diego
de Sagredo y de la Fundación Cárdenas me había invitado a participar como
conferenciante en dichas jornadas. Y aunque en un principio no me sentí digno
de intervenir en tan importante evento, el hecho de haber comenzado a elaborar
hacía ya tiempo un memorándum sobre los edificios de estilo regionalista
existentes en Deba, me animó a lanzarme a la aventura. Por lo menos tenía algo
para comenzar a trabajar, algo que se amoldaba al tema de las jornadas.
Y allí, al otro lado
del charco, me fui con mi exposición a la que titulé “ Arquitectura Vernácula
Vasca: De la casa-torre medieval y el caserío a la arquitectura regionalista vasca
del siglo XX en Deba y su entorno”.
Pero antes de entrar en cuestión creo necesario explicar qué
es y cómo nació la Cátedra Gonzalo de Cárdenas de Arquitectura Vernácula.
Corría el año 2002 cuando fruto de la colaboración entre la Oficina del Historiador de la ciudad de La Habana y la Fundación Diego de Sagredo de España, veía la luz la Cátedra Gonzalo de Cárdenas. En la actualidad, dicha cátedra está también patrocinada por la “Fundación Cárdenas” de Madrid y por las empresas cubanas Restaura Arquitectura y Urbanismo y la Agencia Receptora San Cristobal, ambas pertenecientes a la Oficina del Historiador de la Habana.
Corría el año 2002 cuando fruto de la colaboración entre la Oficina del Historiador de la ciudad de La Habana y la Fundación Diego de Sagredo de España, veía la luz la Cátedra Gonzalo de Cárdenas. En la actualidad, dicha cátedra está también patrocinada por la “Fundación Cárdenas” de Madrid y por las empresas cubanas Restaura Arquitectura y Urbanismo y la Agencia Receptora San Cristobal, ambas pertenecientes a la Oficina del Historiador de la Habana.
Javier de
Cárdenas Chávarri junto al Historiador
de la ciudad de La Habana, Eusebio Leal Spengler.
|
La cátedra recibe el nombre del ilustre arquitecto Gonzalo
de Cárdenas Rodriguez, hijo del también arquitecto Manuel de Cárdenas Pastor y
padre del presidente de la Fundación Diego de Sagredo y de la Fundación Cárdenas,
el también arquitecto Javier de Cárdenas Chávarri.
La familia De
Cárdenas lleva vinculada a la villa de Deba desde alrededor de ciento cincuenta
años, cuando el cubano Ramón de Cárdenas Padilla comenzó a pasar los veranos en
Deba. Desde entonces esta familia no ha faltado a la anual cita veraniega en
Deba; precisamente correspondiendo a esa fidelidad, Manuel de Cárdenas Pastor y
por añadidura su familia, fueron nombrados en 1949 Hijos Adoptivos de Deba.
Y precisamente
también, ese sentimiento del origen cubano
de sus ancestros fue la razón por la que Javier de Cárdenas Chávarri, marqués
de Prado Ameno, se volcase hace años en la recuperación, salvaguarda y difusión
del patrimonio vernáculo en general y cubano en particular, algo que como pude
comprobar, le ha hecho ganarse un buen número de amigos en la antigua provincia
española de ultramar.
APERTURA DE LAS XV JORNADAS DE
ARQUITECTURA VERNÁCULA
Las jornadas que se celebraron entre los días 5 y 8 de marzo
fueron presentadas en la Basílica Menor del Convento de San Francisco de Asís,
de La Habana. El lugar representaba mucho para mí: en él habían residido, hasta poco después del triunfo de la Revolución, numerosos frailes guipuzcoanos y vascos, todos ellos salidos del semillero de Arantzazu.
El acto inaugural fue abierto por Eusebio Leal Spengler, director de la Oficina del Historiador de esa ciudad, importante personalidad político-cultural y responsable de la restauración del Casco Histórico de La Habana, declarado por la Unesco en 1982 Patrimonio de la Humanidad.
El acto inaugural fue abierto por Eusebio Leal Spengler, director de la Oficina del Historiador de esa ciudad, importante personalidad político-cultural y responsable de la restauración del Casco Histórico de La Habana, declarado por la Unesco en 1982 Patrimonio de la Humanidad.
La intervención de Eusebio Leal, miembro del Comité Central
del Partido Comunista de Cuba, católico practicante y según se dice, ferviente
devoto de la Virgen de la Caridad del Cobre, patrona de Cuba, fue algo
inolvidable para quienes asistimos al acto. Pocas veces se tiene la oportunidad
y el privilegio de escuchar a un orador de su talla, tan culto, y que a la vez diga tantas verdades en tan
poco tiempo; un verdadero humanista, un hombre sabio. A quienes escuchamos sus
palabras, éstas nos supieron a poco.
En la imagen, la intervención de Eusebio Leal. A la derecha, sentados,
Javier de Cárdenas Chávarri y el director de la Cátedra Gonzalo de
Cárdenas, Daniel Taboada Espiniella. |
Tras la intervención de Eusebio Leal pudimos escuchar a Javier
de Cárdenas, alma mater de estas jornadas que este año cumplen ya su
decimoquinta edición y a las que el propio Javier califica como una reunión de
amigos por el buen ambiente que suele reinar en las mismas. Y efectivamente esa
sensación nos dio al escuchar ese día y los posteriores a Daniel Taboada
Espiniella, director de la Cátedra Gonzalo de Cárdenas de La Habana; un
personaje que irradia simpatía, humanidad y sabiduría.
Tras la intervención de éstos, se procedió a la entrega de
medallas y diplomas a los nuevos miembros distinguidos de la cubana Cátedra de
Arquitectura Vernácula Gonzalo de Cárdenas.
DEBA EN LAS CONFERENCIAS
Las conferencias tuvieron lugar los días 6, 7 y 8 de marzo
en la biblioteca Rubén Martinez Villena, este año con una dedicación especial
al 325 aniversario de la fundación de la ciudad cubana de Matanzas.
Intervinimos quince ponentes, tanto cubanos como de Estados Unidos y España.
El día 7 me correspondió abrir el turno de ponencias; la mía
bajo el título “Arquitectura Vernácula Vasca: De la casa-torre medieval y el
caserío a la arquitectura regionalista vasca del siglo XX en Deba y su
entorno”.
Para comenzar, hice mención al lugar geográfico de donde yo
procedía, a su ubicación en Gipuzkoa y dentro del Geoparque de la Costa Vasca, a su cultura, su historia, a algunos hijos
de Deba relacionados con Cuba, como Francisco de Lersundi, Capitán General y
Gobernador de la Isla, o Fray Lucas Iruretagoyena, franciscano debarra que se
unió a los revolucionarios de Fidel Castro y luchó en Sierra Cristal junto a
Raúl Castro.
Metidos ya en el tema, hablé sobre los orígenes y los
porqués de la arquitectura regionalista en el País Vasco así como de los
elementos arquitectónicos que ésta recoge y en cierto modo reutiliza en el
siglo XX de dos tipos de edificaciones vernáculas como son las casas-torre
medievales y el caserío vasco.
Mediante fotografías fui mostrando ejemplos concretos, no
sólo de Deba sino de lugares del entorno,donde haciendo un paralelismo entre
edificios de los siglos XV , XVI, XVII y XVIII, y otros del primer tercio del siglo XX
se veía claramente la adaptación de lo vernáculo a la arquitectura
regionalista.
Dos edificios en Deba: el primero el caserío Arriolabeña del siglo XVI; en segundo lugar el chalé de los Chávarri, construido en 1932 por Manuel de Cárdenas. |
Hablé del primer y segundo Ensanche del Arenal de Deba y de su
historia a través de los siglos, desde que tras la fundación de la villa en
1343 durante los primeros años se reuniese en aquel inmenso arenal el Concejo Municipal para tratar los asuntos
del gobierno del municipio; y de cómo a partir de finales del siglo XIX los
moradores de la antigua villa fueron arrebatando al mar aquel espacio.
Hablé también de personajes relacionados con el regionalismo
vasco, tanto arquitectos como promotores de algunos edificios regionalistas
históricos, como Alfred Baeschlin o Gonzalo de Cárdenas quien precisamente da
nombre a la cátedra hispano-cubana.
Y cómo no, hablé del regionalismo en Deba, mi pueblo; ese pueblo que tanto ha
tenido y tanto ha perdido a lo largo de la historia. Me centré en los edificios
de arquitectura regionalista en la villa; tanto la realizada por Manuel y Gonzalo
de Cárdenas como la realizada por otros arquitectos.
Hablé también del antiguo Hotel Miramar, el construido por Gonzalo
de Cárdenas, una obra racionalista de primer orden, ejemplo emblemático de
aquel estilo que convivió con el regionalismo del momento.
Resumiendo: como dijo Javier de Cárdenas en su discurso de
clausura donde hizo expresa, cariñosa y emocionada mención a Deba, “Creo que durante estas
Jornadas ha quedado bien claro y os habéis enterado todos los asistentes dónde
está Deba”.Y efectivamente así fue, como quedó certificado con las
risas y aplausos de los asistentes.
Hace unos días enredando en Google abrí la página de "Habana Radio, la Voz del Patrimonio Cubano"; en primera plana un artículo de las redactoras
María Victoria Pardo y Yamira Rodriguez. El artículo, fechado el 8 de marzo y titulado “Tradición y
modernidad o el legado de la arquitectura vernácula”, hacía referencia a la segunda de las jornadas, la que yo intervine; en cabecera,
presidiendo la noticia, mostraba una gran fotografía de Deba. Efectivamente los
de Habana Radio también se habían enterado de dónde está Deba.
Buenos días, Alex:
ResponderEliminarNo consigo enviarte un mensaje. Soy Blanca de Vitoria, del sábado en el museo. ¿Podrías mandarme tú un mensaje a mi dirección, y así te cuento?
blanca.urgell@ehu.eus
Un saludo,
Bl.
B tardes. Resultó sustancial para mí leer este artículo de su blog por los trillos comunes: soy arquitecto que trabajo en plan de manejo del valle de viñales donde la arquitectura vernácula constituye uno de los atributos del VEU de su declaratoria como paisaje cultural de la humanidad.
ResponderEliminarEs interesante la evolución de DEBA - con su "tanto ganado y su tanto perdido" , como usted menciona con otras palabras en su participación en la XV Jornadas Técnicas de Arquitectura Vernácula celebradas en la capital cubana de La Habana, importante evento organizado por la Cátedra Gonzalo de Cárdenas de Arquitectura Vernácula y por la Oficina del Historiador de La Habana. La impronta que dejó el pasado en esa ciudad- lo preexistente- de tantos siglos , ha sido el espíritu que ha erigido el "día siguiente" , el hoy , lo contemporáneo en el más sensible compromiso. Viñales es algo de eso: un pequeño reservorio donde lo vernáculo en la arquitectura, la artesanía y otras manifestaciones, acude al auxilio de la cultura del tabaco...
ResponderEliminar