jueves, 17 de noviembre de 2022

 

EL KUMANO KODO ISEJI
Y
               EL CAMINO DEL NORTE                         




El pasado 8 de noviembre Deba recibió la visita de una delegación japonesa perteneciente a la Agencia para la Promoción Regional Sur en la Prefectura Gubernamental de Mie. La delegación vino acompañada por Mikel Aizpuru, Director de Patrimonio Cultural del Gobierno Vasco, siendo recibidos por varios miembros de la Asociación de Amigos de los Caminos a Santiago de Deba.

La citada agencia japonesa es la responsable del mantenimiento y promoción de una de las rutas del camino Kumano Kodo, concretamente la “Kumano Kodo Iseji”, una de las rutas de peregrinación más antiguas de Japón, con más de mil años de historia. Dicho camino japonés junto al Camino de Santiago son las dos únicas rutas de peregrinación consideradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El interés de la delegación japonesa era conocer nuestro Camino con objeto de establecer vínculos de amistad y vías de comunicación para el intercambio de experiencias e información.


Caserío Iparragirre. Los hermanos Mitxel y Txema Díez, hospitaleros del albergue debarra junto a los amigos de la Kumano Kodo Iseji. En primer término SHIMODA Tsugikazu, Director General de la Agencia para la Promoción Regional Sur de la Prefectura Gubernamental de Mie.
 
Tras su recibimiento en Itziar, quienes tuvimos la suerte de formar parte del grupo nos dirigimos al caserío Iparragirre donde con exquisita delicadeza y ritual amabilidad cada uno de los miembros de la delegación nipona nos hicieron varios presentes a todos los acompañantes. Desde allí se recorrió a pie el camino hasta la ermita de santa Katalina, vinculada al Camino de la Costa, una de las más bellas atalayas del Cantábrico, donde los amigos japoneses quedaron fascinados por la serena belleza del lugar.

 


El grupo japonés junto a Mikel Aizpuru, Director de Patrimonio del Gobierno Vasco y Jose Mari Izaga, de la Asociación de Amigos de los Caminos a Santiago.



                  Tomando buena nota de cada uno de los detalles.

Lo que más nos sorprendió a quienes estuvimos presentes fue el gran interés que en todo momento mostraron los visitantes, tomando buena nota de temas referentes al patrimonio, naturaleza, clima, historia, geografía y organización del recorrido y de los albergues en el Camino de Santiago. También nos sorprendió su insistencia y voluntad de realizar un tramo del “Camino del Norte” hasta Deba, cosa que hicieron acompañados por tres de los guías, los hermanos Mitxel y Txema Diez y el director de Patrimonio Cultural, Mikel Aizpuru. El resto bajamos en coche a Deba para ir preparando algunas cosas.

Ermita de Santa Catalina. Mikel Aizpuru responde a los amigos japoneses sobre algunas preguntas relacionadas con el patrimonio en el "Camino del Norte".

El camino Kumano Kodo tiene en su recorrido largos tramos de calzada empedrada, característica que le da carácter al milenario camino japonés. Este dato fue resaltado por nuestros visitantes; por ello, el descenso a Deba por el camino de San Roque y por la calzada empedrada en su último tramo, les causó muy grata impresión.

Llegada a Deba. Durante el trayecto por la ermita de San Roque algún peregrino se unió al grupo.

 A la llegada del grupo a Deba esperábamos a guías y visitantes junto a la ermita de la Cruz acompañados por Patxi Aizpitarte, párroco de la iglesia de Santa María. Entre calles, nos dirigimos hacia la Plaza Zaharra, donde se ubica el monumental templo. La iglesia, totalmente iluminada, fascinó a los japoneses. Y no es de extrañar ya que además de su belleza, desde sus orígenes el nexo entre del Camino de Santiago y el de Kumano Kodo precisamente se encuentra en la espiritualid -una sintoísta, la otra cristiana- origen y razón de ambos caminos.

Tras la visita a la iglesia de Santa María la expedición se dirigió al albergue de peregrinos donde pudieron tomar nota de todos los servicios con los que cuenta el centro. Se les informó de que quienes atienden el albergue son todos voluntarios no remunerados. Jose Mari Izaga les comentó que hasta la fecha, durante el año 2022 el albergue debarra ha acogido a más de 8000 peregrinos, cifra que les sorprendió. Ese día (ocho de noviembre) habían llegado catorce peregrinos de diversas nacionalidades, entre ellos un ruso. Lo del peregrino ruso sorprendió a los japoneses, teniendo en cuenta el momento que atraviesa su país, en guerra con Ucrania. El camino Kumano Kodo no dispone de albergues de peregrinos y precisamente uno de los intereses de la delegación japonesa era conocer el funcionamiento de los albergues del Camino de Santiago para evaluar su implantación en el camino japonés.

El grupo en el claustro de la iglesia de Santa María. En el centro, de rodillas, el párroco Patxi Aizpitarte.

Finalizada la visita al albergue jacobeo llegó el colofón a la visita: la "afari-merienda" en la sociedad Itxas-Begi. Miren Ibañez y Pako Salegi, miembros de la Asociación de Amigos de los Caminos a Santiago de Deba, habían preparado una afari-merienda basada en productos elaborados en Deba y Mutriku, poblaciones situadas en el Camino Jacobeo del Norte. Todos dieron buena cuenta del queso, las anchoillas, el bonito, el pan y el txakolí de la comarca.
Quedaron sorprendidos por el funcionamiento de las sociedades gastronómicas vascas, algo que desconocían; y quedaron también tan contentos que hicieron una pregunta: ¿si volvemos el próximo mes de mayo, podremos volver a comer en esta sociedad?
¡ Por supuesto que sí!
...y más teniendo en cuenta que la próxima vez es probable que vuelvan acompañados por el Gobernador de la prefectura de Mie.


Sociedad Itxas-Begi. Confraternización de "los dos caminos" alrededor de la mesa.






martes, 1 de noviembre de 2022

 

LA GOLETA “AINGUERU GUARDAKUA” Y EL PAILEBOT “RIO EGO

      Su interesante y poco conocida historia.


El “Aingueru guardakua” fondeado en la ría de Deba con las velas desplegadas. La casa que se ve a la izquierda es “Villa Uran”. Entre las velas, junto al primer mástil, puede verse el palacio de Aguirre. A la derecha , el puente sobre la ría de Deba.(Foto cedida por la familia Berasaluce).

Prácticamente todos los debarras de cierta edad hemos visto en numerosas ocasiones las imágenes de estos dos barcos que han pasado a la historia fotográfica del puerto de Deba. La primera de ellas corresponde a la goleta “Aingueru Guardakua” cuyo armador y patrón fue Hilario Berasaluce. El segundo de los buques es el pailebot “Río Ego” inmortalizado el día de su botadura, en 1920, por el magnífico fotógrafo eibarrés Indalecio Ojanguren. Lo que pocos conocen son los avatares de dichos buques y cuál fue el final de ambos. Ese es precisamente el motivo de este artículo: dar a conocer la curiosa historia de estos dos legendarios veleros.  


El “Aingueru guardakua”

El pasado mes de julio, con motivo del 500 aniversario de la vuelta al mundo de Juan Sebastián Elcano, tuve el placer de dar una conferencia bajo el título “Itziar (1294)- Deba (1343). Una historia ligada al mar”. El evento estuvo organizado por Elkano Itsas Herria, el Ayuntamiento de Deba y Debako Kultur Elkartea.

Preparando dicha conferencia en la que hice un repaso por la historia marítima de Itziar y Deba desde el año 1294 hasta la actualidad, tuve la suerte de encontrar un gran número de interesantes datos para mí hasta entonces desconocidos; es el caso de este buque de madera del que a pesar de conocer su pasada existencia y la de su armador, jamás había imaginado cuál fue su final.   

Fue la familia de su propietario y patrón, concretamente mi amigo Willy Berasaluce, biznieto de Hilario Berasaluce, quien me proporcionó valiosos documentos tanto de la goleta como de su armador.

                                                               

Hilario Berasaluce Lazcano, armador y patrón del “Aingueru guardakua”. (Foto cedida por la familia Berasaluce).


Según consta en esos documentos, el casco del” Aingueru guardakua” fue construido en el astillero de la Villa de Ondarroa bajo la dirección del Maestro Constructor Don Cándido de Arriola. Posteriormente fue aparejado y armado en el astillero de la villa de Zumaia bajo la dirección de Don Pedro Alberdi. La propiedad de la goleta fue escriturada ante el notario de Zumaia don Francisco Otermin el 9 de Julio de 1904.  La nave, de veintitrés metros ochenta y ocho centímetros de eslora, seis metros y cincuenta centímetros de manga, dos metros y cincuenta y cinco centímetros de puntal, tenía un tonelaje total de cerca de noventa y siete toneladas; exactamente noventa y seis con cincuenta y ocho toneladas. Fue inscrita en el Libro de Buques de la Comandancia Militar de Marina de San Sebastián el 30 de diciembre de 1904.

Fragmento  de las escrituras del “Aingueru guardakua” donde se detallan las características técnicas del buque.

 El “Aingueru-guardakua” o “Aingueru-guarda-kua” (aparece escrito de ambas formas en las escrituras de propiedad e inscripción marítima de la nave, y “Aingeru Guardakoa”  en la prensa de la década de 1930 y documentos posteriores) era propiedad de cuatro socios a partes iguales. Su construcción costó cincuenta mil pesetas de la época. Además de Hilario y uno de sus hermanos, Francisco (de profesión carnicero) dos años más joven que él, también eran socios el industrial Venancio Zubimendi y Balzola, vecino de Zestoa, y el médico Celedonio Arriola Ochoantezana, vecino de Ondarroa.

En la escritura queda reflejado que “todos los (socios) comparecientes (ante el notario) de mutua conformidad designan para armador del expresado buque a Don Hilario Berazaluce, el cual es á su vez Patron y Capitan del mismo”.   

Hilario Berasaluce Lazcano, natural de Deba era hijo de Simón Berasaluce Arrieta, armador y patrón de la goleta “Ntra. Sra. de la Concepción” y hermano de Pedro Manuel Berasaluce Lazcano, armador y patrón de la goleta “Margarita”.



  Certificados en los que se acredita a Hilario Berasaluce como patrón de cabotaje. En el primero, expedido en 1879 se le autoriza para navegar “desde Cabo Higuer á Bayona de España”. En el segundo, expedido el 18 de marzo de 1896 se le autoriza a navegar como patrón  “desde Bayona de España al Cabo de Gata, incluso la Costa de Portugal”.

El Aingueru Guardakua realizaba navegación de cabotaje entre puertos vascos, generalmente Donostia-San Sebastián y puertos de Galicia y Andalucía, a menudo Cádiz donde solía cargar sal. Tirando de hemeroteca he podido ubicarlo en diversos puertos y con diferentes cargas. Por poner algunos ejemplos: en 1913 parte del puerto de Pasajes con un cargamento de duelas (tablas para elaborar barriles) con destino al puerto andaluz de Almería. Todos los tripulantes, al menos en ese viaje, eran vecinos de Deba: Hilario Berasaluce, Eleuterio Azpiazu, Modesto Echaniz, Joaquín Echaniz y Esteban Elosua. Tras descargar su mercancía, el “Aingueru Guardakua” se dirigió en lastre al puerto de Cádiz donde cargó sal con destino al puerto de San Sebastián. El 28 de agosto de 1928 aparece entrando en la dársena del puerto de Donostia-San Sebastián con un cargamento de carbón procedente de Gijón. El 12 de abril de 1931 se encuentra cargando cemento en la dársena del puerto donostiarra y el 22 de abril de 1934 sale de Donostia con destino a Villagarcía de Arosa con cemento.


                                                              

En la fotografía de arriba el sextante y el barómetro de Hilario Berasaluce. En la de abajo, la corredera y el compás que utilizó el patrón debarra. (Fotos cedidas por la familia Berasaluce).

Hilario, patrón del “Aingueru Guardakua”, fue padre del gran maestro vidriero Simón Berasaluce, artista cuya obras se pueden contemplar por todo el mundo, mayoritariamente en Estados Unidos, Sudamérica, Francia, España y cómo no, en Deba, su pueblo natal. También fue abuelo de Javier Berasaluce Marquiegui gran portero del Real Madrid, equipo con el que consiguió cinco Copas de Europa consecutivas junto a compañeros como Juanito Alonso, Alfredo Di Stefano, Paco Gento, Luis Molowny, Muñoz, Puskas, Kopa… etc.

Pero centrándonos en el “Aingueru guardakua” o “Aingeru Guardakoa” como aparece denominado a menudo, diré que los datos más impactantes sobre esta goleta los descubrí en la web islandesa uboat.net cuyo editor es Guomundur Helgason, un verdadero experto en historia de la guerra submarina durante la Primera y Segunda Guerra Mundial. Dicha web aporta valiosos datos sobre los submarinos alemanes en ambas guerras, sus comandantes y operaciones realizadas, incluyendo también datos sobre todos los barcos aliados atacados.

Según los datos que nos proporciona, el Aingeru Guardakoa, de 97 toneladas, fue construido en 1904 y su propietario era Hilario Berasaluce. Como puerto base aparece “Guipuzcoa”, sin concretar el puerto. Hasta ahí nada que no conociésemos. Lo interesante es la información que sigue.

La goleta debarra, según la web islandesa, hacía la ruta de Lisboa a Tánger (no se especifica la carga que trasportaba) cuando el 14 de octubre de 1941 se encontraba frente a la costa gaditana, concretamente a la altura de cabo Roche (Conil de la Frontera), posición 36º 20´ N ,  6º 15´W.

Eran las 00:45 horas de la madrugada cuando Walter Kell, comandante del submarino alemán U-204 daba la orden de lanzar dos torpedos contra el barco debarra. Probablemente, al ser de noche lo confundió con un caza- submarinos inglés con base en Gibraltar.

Según uno de los tripulantes que en ese momento se encontraba en la popa del barco, sintió una especie de zumbido y burbujas pero pensó que se trataba de un banco de sardinas. Ese primer torpedo pasó de largo muy cerca de la popa sin hacer blanco. No sucedió lo mismo con el segundo de los torpedos que dio de lleno a la goleta, hundiéndose esta rápidamente. Dos de los siete tripulantes del Aingeru Guardakoa murieron tras el impacto del torpedo y los cinco restantes pudieron sobrevivir gracias a que se agarraron a los restos de la nave que quedaron a flote. Los supervivientes fueron rescatados por un pesquero gallego que los llevó al puerto de Santa Uxia de Ribeira, en Galicia.

Sala de torpedos de un submarino alemán durante la II Guerra Mundial. Un torpedo como estos hundió al “Aingueru guardakua”. (Foto: https: //forocoches.com "Dos torpedos…¡contra un velero!".


No se tienen más datos del hundimiento de la goleta debarra y de sus porqués ya que el submarino alemán U-204, uno de los 1131 submarinos alemanes que lucharon en la Segunda Guerra Mundial, popularmente conocidos como “Lobos Grises”,  fue hundido el 19 de octubres de 1941, cinco días después de haber torpedeado al Aingeru Guardakoa. Fue en el Estrecho de Gibraltar, frente a Tánger, posición 35º 46´N, 06º 02´W. El hecho sucedió cuando la corbeta británica HMS Mallow le lanzó varias cargas de profundidad tocándolo de muerte; posteriormente fue rematado por la balandra HMS Rochester.

El hundimiento del submarino alemán y la muerte de todos sus tripulantes, 46 hombres, nos privó de conocer si realmente el ataque al Aingueru Guardakua fue una equivocación, hecho probable ya que España era un país neutral, incluso más bien amigo de la Alemania nazi.

En cuanto a la carga que podía transportar la goleta de Hilario Berasaluce, en ruta de Lisboa a Tánger, se desconoce. Desde su construcción en 1904 hasta su hundimiento en 1941 habían transcurrido 37 años. Nos queda la pena de no poder ver la silueta de la legendaria goleta fondeada en la ría de Deba con sus velas desplegadas, pero al menos nos queda su fotografía.


Una duda sobre Hilario Berasaluce y el Aingueru Guardakua.

Según aparece en la partida de Bautismo conservada en el Archivo diocesano de Donostia-San Sebastián, Hilario nació el 14 de enero de 1856. No me ha sido posible encontrar la fecha de su muerte en los libros  de la parroquia de Deba a pesar de haberlos revisado. El Aingeru Guardakoa fue hundido en 1941 y ese año, en el caso de que Hilario aún viviese, tenía que tener 85 años. Lógicamente si el buque aún le perteneciese no le tendría a él como patrón pues ya estaría más que jubilado. Esto me lleva a pensar que para esas fechas seguramente la goleta ya habría sido vendida a otro armador.

Por otro lado las informaciones sobre la goleta se hacen muy confusas según de qué fuentes provengan. Datos como el tonelaje del buque (a veces aparece como de 97 toneladas, otras de 195 toneladas e incluso de 300 toneladas), la propulsión: velero o motovelero, incluso la diferencia entre las nomenclaturas Aingueru Guardakua y Aingeru Guardakoa pueden hacernos dudar de si se trata del velero debarra. Lo curioso es que a pesar de esas diferencias siempre aparece Hilario Berasaluce como armador de dicha nave. Personalmente opino que se trata del mismo buque. Sea lo que fuere, estas dudas me obligan a proseguir la investigación.    

 

El pailebot “Río Ego”


Botadura del “Rio Ego”. En la foto se puede apreciar el numeroso público asistente situado en las dos márgenes de la ría. (Foto de Indalecio Ojanguren. Archivo Diputación Foral de Gipuzkoa).


En agosto de 2015 publiqué un artículo en el nº 91 de la revista DEBA y en mi blog personal al que titulé “Eustaquio Arrinda y los hermanos Tomás y Antonio Aznal. De Mendavia a Terranova”. Tiempo después recibí un correo electrónico de Vicente Sanahuja, editor de la magnífica web VIDA MARÍTIMA, una de las mejores y más veteranas de las dedicadas a temas marítimos. Vicente me solicitaba permiso para publicar en su web las fotografías de mi artículo a lo que gustosamente acepté; era un honor para mí.

Las fotos y algunas referencias de mi artículo sobre Eustaquio Arrinda y los hermanos Aznal en Terranova fueron publicadas en su web en uno de los  artículos al que tituló “El Abrego y D. Eustakio Arrinda; Leyenda Vasca”. Con su agradecimiento me envió una fotografía del bacaladero de la PYSBE  “Abrego”, buque en el que había navegado Eustaquio Arrinda, protagonista de ambos artículos. A la vez se ofrecía a cederme alguna foto de su web en el caso de que algún día lo necesitase.

Hace unos días preparando este artículo recurrí a la web de Vicente Sanahuja por si casualmente aparecía en ella información y alguna fotografía que yo no tuviese sobre el “Río Ego”. Mi sorpresa fue mayúscula pues en ella se incluía un artículo titulado “El pailebot de cuatro palos Río Ego”.

Yo tenía cierta información sobre dicha nave, incluso fotografías que hace años conseguí en el archivo de la Diputación Foral de Gipuzkoa en Tolosa; pero la información del artículo de Vicente Sanahuja era bastante más rica y completa de la que hasta ahora disponíamos quienes desde niños nos hemos criado a remojo en las aguas de la ría de Deba, donde se botó el Río Ego. Esta es la historia de aquel bello pailebot de cuatro palos.


El “Río Ego” visto de proa minutos antes de su botadura. Al fondo la población de Deba. (Foto de Indalecio Ojanguren. Archivo Diputación Foral de Gipuzkoa).


El Río Ego, de 894 toneladas de registro bruto, fue construido por Astilleros del Deva S.A. Sus armadores fueron los empresarios eibarreses Gastañaga y Errasti y la botadura del buque, el 29 de septiembre de 1920, se hizo coincidir con la mayor pleamar del año. Tenía una eslora de 51,64 m. una manga de 11,27 m. y un puntal de 5,81 m. Al evento acudió numeroso público que presenció la botadura desde ambas márgenes de la ría, tal y como lo atestiguan las fotografías realizadas por el fotógrafo eibarrés Indalecio Ojanguren.

En las fotografías realizadas durante la botadura, el buque se encuentra lógicamente sin la arboladura, es decir, sin los cuatro mástiles que se instalarían posteriormente. Además del velamen aparejado sobre estos cuatro mástiles, el pailebot estaba provisto de un motor a vapor, era por tanto un motovelero.

Existen pocos datos sobre los primeros viajes tras su botadura aunque es de suponer que realizaría navegación de cabotaje entre diversos puertos de la Península. En julio de 1922 arriba a Málaga procedente de Villagarcía de Arosa   y en marzo de 1923 se le localiza en Valencia donde son arrestados dos de sus tripulantes tras una pelea en un teatro de la ciudad. Hay algo en esa trifulca que invita a pensar que más que de un teatro pudiera tratarse de un cabaret o antro nocturno.

Ese mismo año,1923, el “Río Ego” es vendido en Portugal a la empresa francesa La Morue Francçaise et Sécheries de Fécamp, pasando a denominarse “Zazpiakbat” (en euskara: “los siete uno”, en referencia a los siete territorios vascos). Dicha empresa, domiciliada en París era producto de la fusión de una empresa bacaladera creada en 1905 por una familia originaria de Baiona, en el País vascofrancés, apellidada Lagasse, y de otra empresa denominada Société Anonyme de Sécheries de Morues de Fécamp, perteneciente a la familia Le Borgne. Aunque el puerto base era Fécamp (Alta Normandía), el buque fue matriculado en las islas de Saint Pierre et Miquelon (Terranova), dedicándose desde entonces a la pesca y transporte del bacalao salado.

Bandera de la empresa bacaladera francesa que compró el “Río Ego” posteriormente rebautizado como “Zazpiakbat”: La Morue Française et Sécheries. Sus colores son los de la bandera francesa. Imagen: https: wrecksite.eu (Sergio De Phocée)


Bella fotografía del “Zazpiakbat” ex “Río Ego” saliendo del puerto francés de Fécamp. Además de sus cuatro mástiles vemos el humo producido por las calderas de su motor. (Foto: cortesía de Association Fécamp Terre Neuve. http://www.fecamp-terre-neuve.fr)


En 1922 la empresa bacaladera de las familias Lagasse y Le Borgne habían adquirido un vapor con casco de acero al que denominó “Gure-Herria”, un dato que muestra el sentir vasco de la familia Lagasse.

En un artículo editado en el diario “Les Anales Coloniales” el 25 de marzo de 1924, se describía al ex “Río Ego”, re-denominado “Zazpiakbat” de este modo:

..." El pesquero más grande del mundo, el cuatro mástiles ZAZPIAKBAT, que puede cargar más de 20.000 quintales de bacalao, cuyo armador es la Sociedad "La Morue Française", 80, rue Taitbout, en París, y matriculado en las islas de Saint Pierre et Miquelon, ha salido esta mañana del puerto de Fécamp y llevando una tripulación de 55 hombres.

El ZAZPIAKBAT permanecerá en los bancos de Terra- Nova por ocho meses consecutivos y volverá a Francia con su carga de bacalao, tras su escala en Saint Pierre et Miquelon.
El armamento de este navío indica claramente que Francia, que como se dice, no tiene la intención de dejarse superar por ningún país...".

Solo dos meses más tarde, el 23 de mayo de 1924, el diario L´Ouest Eclair publicaba la siguiente noticia:

"Vuelta desde Terra-Nova e Islandia. Fécamp, 21 de mayo.
El cuatro mástiles ZAZPIAKBAT, que partió hacia Terra-Nova el 25 de marzo, entró en Fécamp, proveniente de Brest, después de haber sufrido grandes averías en su viaje de ida.
Las averías son importantes, dos mástiles están quebrados, se perdió el bauprés, y sufre numerosos desgarros en el casco".

Según opinión de Vicente Sanahuja en su web VIDA MARÍTIMA "la calidad del material empleado en la construcción dejaba que desear, como lo fue la de la mayoría de los buques construidos al calor de la Gran Guerra, en que la madera usada no recibía el tratamiento necesario".

¿Cuál fue el final del "ZAZPIAKBAT" ex "RÍO EGO"?
Vicente Sanahuja se hace la misma pregunta: ¿Cuál fue su destino final? Lo desconocemos, pero vistas las averías creemos que pudo ser revendido, cambiando su nombre, usado como pontón o bien desguazado".

Lo que sí sabemos es que la empresa bacaladera de Fécamp en 1928 compró  a una naviera alemana otro motovelero que había sido construido en 1920 en el puerto alemán de Bremen, este con casco de acero. Al nuevo buque la empresa también llamó "ZAZPIAKBAT", seguramente en recuerdo de aquel buque botado en la ría de Deba, el "Río Ego".


Fotografía del segundo "Zazpiakbat", un motovelero con casco de acero. Foto cortesía de Association Fécamp Terre-Neuve. http://www.fecamp- terre-neuve.fr


Bibliografía:

-Archivo Diocesano de Donostia-San Sebastián. Registros Sacramentales.

-Bernet, Etienne: "Zazpiakbat" (I), "Zazpiakbat" (II). Association Fécamp Terre-   
 Neuve. http://www.fecamp-terre-neuve.fr

-Familia Berasaluce Marquiegui: documentos proporcionados por ésta: escrituras   de propiedad e inscripción marítima del buque. Títulos de patrón de cabotaje de   Hilario Berasaluce Lazcano.

-Helgason, Goumundor: "Aingeru Guardakoa, velero español". uboat.net

-La Voz de Guipúzcoa (hemeroteca). 29 agosto 1928, p.14; 7 octubre 1930, p.13; 12 abril 1931, p.11; 22 abril 1934, p.11.

-Sanahuja, Vicente: "El pailebot de cuatro palos Río Ego". https://vidamaritima.com 





          






 "VILLA-URAN"

EN LA MEMORIA HISTÓRICO-FOTOGRÁFICA DE DEBA

              


Aunque a las jóvenes generaciones les parezca extraño, hasta su derribo a finales de la década de 1960 este edificio estuvo ubicado en la calle Astillero, en el espacio que ocupa el bloque de casas situado entre el comienzo de la calle Agirretxe  y el supermercado  Eroski. Era un edificio cúbico de tres plantas más ganbara (desván) y cubierta a cuatro aguas. Su estilo recordaba al de las austeras  mansiones barrocas vascas, con una escalinata exterior de doble acceso,  una ventana de “ojo de buey” junto a la puerta de ingreso y balcones con barandillas  de hierro forjado. El edificio contaba en su parte posterior con un extenso jardín. Como curiosidad, decir que durante una época (1893/1894) el edificio fue escuela pública; según algunos la primera escuela pública de Deba.


Fotografía del lugar donde en el pasado estuvo ubicada "Villa-Uran".

Villa-Uran fue adquirida y reformada en 1887 por Leopoldo Augusto Cueto, primer marqués de Valmar, propietario a su vez del palacio de Aguirre. La mayor de sus dos hijas, Flavia Emilia, casada con Joaquín Fuentes Bustillo, además del título de marquesa de Valmar, heredó el Palacio de Aguirre y la ermita de “San Josepe”. La más pequeña, María Jimena, casada con Luis del Rosal, heredó “Villa-Uran”. Su última propietaria fue María del Pilar Carrillo de Albornoz y del Rosal, esposa de Leopoldo Arranz Alvarez, quien la heredó de su madre, Mª Amparo del Rosal Cueto, nieta del marqués de Valmar. Aún hoy uno de los hijos de María del Pilar, Juan Carlos Arranz Carrillo de Albornoz, sigue fiel a la cita veraniega debarra tal como lo hicieron sus antepasados.


La fotografía corresponde a los primeros años del siglo XX y aunque de mala calidad creo interesante publicarla. En primer plano vemos dos goletas fondeadas en la ría de Deba. Tras ellas, en el centro, el palacio del marqués de Valmar conocido como "Aguirreche". Algo más a la izquierda, con un torreón picudo, la casa "Ichasvista" construida por Leopoldo Fuentes Bustillo y Cueto, nieto del marqués, y algo más a la izquierda, al fondo, junto al monte, la inconfundible silueta cúbica de "Villa-Uran".
 


La imagen, de Indalecio Ojanguren, corresponde a la década de 1950. Mucho ha cambiado el paisaje urbano desde entonces. En el centro el palacio de Aguirre y a su izquierda, al fondo, al pie del espeso bosque, Villa-Uran, con su tejado a cuatro aguas y su extenso jardín.


 
La fotografía fue realizada durante el curso 1893/1894 con la fachada de Villa-Uran como telón de fondo. En ella  vemos a los jóvenes alumnos, cada uno con su pizarra o libro en las manos. En el centro el maestro don Millán Armero con el globo terráqueo y a sus pies un par de mancuernas para la realización de ejercicio físico, como queriendo transmitir la vieja cita romana “Mens sana in corpore sano”.


A la derecha, Leopoldo Arranz Carrillo de Albornoz, primogénito de la última propietaria de Villa-Uran, María del Pilar Carrillo de Albornoz y del Rosal, biznieta del marqués de Valmar. A la izquierda el autor de este blog.


Villa-Uran, "Aguirreche" y Leopoldo A.Cueto
       ¿Quién fue el marqués de Valmar?


Retrato de Leopoldo Augusto Cueto, marqués de Valmar. (Región de Murcia Digital. https://regmurcia.com).

Cuando en 1.861 Leopoldo Augusto Cueto, marqués de Valmar, adquiere el palacio de Aguirre, Deba es uno de los contados centros balnearios costeros a donde acuden importantes personajes de la aristocracia y la alta burguesía del país. Leopoldo Augusto Cueto (1815-1901) fue una de las más importantes personalidades del mundo de la diplomacia, la política y la cultura españolas del siglo XIX. Ejerció su carrera diplomática en ciudades como París, La Haya, Lisboa, Copenhague, Washington, Viena y Munich. Fue además Secretario de Estado y Senador Vitalicio.

 Pero don Leopoldo fue ante todo un verdadero hombre de letras, un intelectual. Además de filólogo, escritor, crítico literario e historiador, ocupó el cargo de secretario de la Real Academia de la Lengua Española y de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Una buena parte de su actividad creativo-cultural la desarrolló en Deba. La biblioteca del palacio debarra estaba considerada como una de las mejores de la época, contando entre sus libros con numerosas primeras ediciones de autores como Lope de Vega, Góngora o Cervantes.

 El palacio de Aguirre y su anfitrión acogieron a importantes personalidades del mundo cultural, asistiendo a sus tertulias lo mas granado de la sociedad de la época lo que convirtió a esta residencia veraniega en un verdadero parnaso del romanticismo. La hermana de don Leopoldo Augusto Cueto , María Concepción, estaba casada con Ángel de Saavedra, duque de Rivas, primera figura de la dramaturgia romántica española; por tanto, Cueto y Saavedra eran cuñados.

 Fue en este ambiente cuando en 1.862, contratados por el marqués, recalaron en Deba los hermanos Valeriano y Gustavo Adolfo Bécquer, dos sevillanos residentes en Madrid. La llegada a Deba de Valeriano y Gustavo Adolfo, considerados hoy como dos grades  figuras del movimiento romántico en sus vertientes pictórica y poética, fue debido a unos encargos realizados por el marqués a Valeriano. El primero consistió al parecer en la realización de varias copias de obras de autores clásicos; el segundo en la decoración de su biblioteca mediante seis obras pictóricas, alegorías de los grandes clásicos del teatro universal.

Parece ser que los Bécquer realizaron dos visitas a Deba; la primera como se ha dicho en 1.862, y la segunda presumiblemente en 1.864. Es posible que la finalidad de la segunda visita fuera precisamente la realización de las seis pinturas destinadas a decorar el gran mueble de la biblioteca del palacio. Se supone que las estancias de los inseparables hermanos Bécquer en esta localidad debieron prolongarse durante varios meses ya que las obras fueron al parecer realizadas in situ.

                                            

                             

Cuatro de los seis cuadros pintados por Valeriano Bécquer para decorar el mueble de la biblioteca debarra de Leopoldo Cueto. Tanto las pinturas como el mobiliario de la biblioteca se encuentran en las instalaciones de "Gordailua" (Diputación Foral de Gipuzkoa) a la espera de poder ser restaurados algún día.

 

Otro de los personajes que visitaron la residencia veraniega de Leopoldo Augusto Cueto fue el diplomático y escritor español Juan Valera, quien en carta dirigida a su hermana en agosto de 1.871 afirmaba acudir a Deba obligado por su esposa, quejándose de que “ hay mucha gente de Madrid ” “… pero la moda, la elegancia y el buen tono requieren y exigen salir a veranear, y mi mujer se creería la más desdichada criatura del mundo y la más humillada y vejada, si no veranease”. Fue precisamente en Deba, donde Valera compuso “Arcacosua. Poema euskero, místico y picante”  según sus propias palabras para distraer sus melancolías y entretener la ociosidad. Por cierto, fueron las  pulgas debarras quienes según su autor le inspiraron este interesante poema.

    Otro de los visitantes de la residencia del marqués de Valmar fue el gran dramaturgo y poeta romántico José Zorrilla; su breve estancia en Deba durante el verano de 1.887 quedó plasmada en un extenso poema titulado “A escape y al vuelo”. En dicho poema el escritor vallisoletano relataba a la condesa de Guaqui su recorrido por varias poblaciones costeras guipuzcoanas, entre ellas Deba, detallando el recorrido por las calles de esta villa, su visita a la iglesia y al palacio de Valmar.

El marqués de Valmar, tuvo una cordial relación con el escritor romántico debarra Juan Venancio Araquistain. Debió ser precisamente Araquistain quien le animó a colaborar con sus escritos en la publicación bilingüe “Euskal - Erria : Revista Bascongada”, dirigida por el escritor donostiarra José Manterola. “ De mis recuerdos”, “Boga, boga, mariñela” y “La mujer de Guipúzcoa” son tres de los títulos, salidos de la pluma del marqués, que vieron la luz en aquella publicación.